lunes, 29 de noviembre de 2010

LOS SECRETOS DEL YUNQUE

Libro: Los secretos del Yunque. Historia de una conspiración contra el Estado mexicano.

por Dante A. Montaño Brito
“El interior estaba en penumbras, bajo la luz tenue de unas velas colocadas sobre una mesa cubierta con un paño rojo que ostentaba un círculo blanco con el símbolo Y en negro. Sobre la mesa un crucifijo, la imagen de la Virgen de Guadalupe y una espada. Atrás, tres personas con brazalete rojo en el brazo izquierdo con un círculo blanco y con la Y”. Así describe Luis Paredes Moctezuma, hoy ex militante del Yunque, parte del ritual que realizó para iniciarse en éste.
“Primordialidad, reserva, jerarquía y espíritu de lucha. Tengo que ayudar a instaurar el reino de Dios en la Tierra, debo combatir a los enemigos de Dios y de la patria”, son las palabras que, sin entender exactamente su contenido, repitió en la ceremonia. Según cuenta Enrique Cid, alias dentro del Yunque, en el nuevo libro Los secretos del Yunque, editado por Grijalbo.
El volumen contiene la radiografía de una organización secreta de extrema derecha de orientación católica fundada en Puebla por jesuitas en 1953, bajo el lema: Stad firmus, ut incus percusat (Estad firme como un yunque golpeado).  El propósito de la Organización, como la llaman entre ellos, es penetrar y controlar todas las instancias del Estado mexicano para someterlas a un poder oculto, para guiarnos hacia un Estado católico.
Luis Paredes explica que varios miembros del Yunque, desde la década de 1970, han ido penetrando los diversos sectores de la sociedad, sobre todo, penetrando las confederaciones nacionales, como: la Confederación Patronal de la República Mexicana, la Cámara Nacional de Comercio, la Cámara Nacional de la industria de la Transformación, el Consejo Coordinador Empresarial, entre otras. Muchos dirigentes de esas agrupaciones ahora ocupan importantes cargos dentro del PAN.
También han creado asociaciones cívico políticas, como: Desarrollo Humano Integral y Acción Ciudadana (DHIAC), la Asociación Nacional Cívico Femenina (Ancifem), Provida, Testimonio y Esperanza, Unión Nacional de Padres de Familia, México Unido Contra la Delincuencia, Movimiento “Iluminemos México”, Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública, Pro Vida, entre otros, cuya misión es fungir como interlocutores con diversos actores políticos y con la sociedad.
El Yunque también ha filtrado la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA), cuyo secretario ejecutivo, Erick Porres, es miembro de la Organización, sostiene el arquitecto Luis Paredes.
En el volumen de 337 páginas, Enrique Cid confiesa que el Yunque suele reclutar jóvenes de clase media. Y después de una serie de pruebas, las primeras actividades son informar diariamente sobre toda actividad sospechosa, espiar a alguna persona, afiliar a nuevos prospectos, pagar las cuotas y asistir con periodicidad a campamentos donde se les adiestra para el combate físico, se les enseña artes marciales y el manejo de armas de fuego, como fusiles de asalto 30M1, metralletas calibre 22, escopetas, y otras.
El Yunque, según Paredes Moctezuma, después de que el PAN sacó al PRI de Los Pinos, se fue consolidando en una agencia de colocación de puestos políticos, manejada con extremo rigor, para eliminar a la gente que no ayudara a “la causa de Dios”. Los líderes exigen disciplina a la base, argumentando una jerarquía por “derecho divino”.
El autor revela las maniobras del Yunque, explica la forma en que influyó en el PAN (con Felipe Bravo Mena y Manuel Espino como presidentes), en el gobierno de Vicente Fox (con Humberto Aguilar Coronado, subsecretario de Gobernación,  y Ana Teresa Aranda, directora del DIF nacional) y en el de Calderón (Francisco Ramírez Acuña, ex secretario de Gobernación y Felipe Bravo Mena, secretario particular).
Se dice que el Yunque nunca quiso a Calderón como candidato presidencial y menos como Presidente, se dedicaron a sabotear su campaña. El autor sostiene que el escándalo por el caso Hildebrando (el cuñado incómodo) no fue casualidad, sino que fue provocado por la filtración de documentos a la prensa, por parte de Jorge Ocejo Moreno, entonces coordinador de asesores del director general de Petróleos Mexicanos.
Luis Paredes, ex presidente del Frente Universitario Anticomunista (FUA), quien conoció al Yunque desde dentro, se dice sorprendido de la forma en que el gobierno de Felipe Calderón ha sido cooptado por miembros del Yunque, a pesar de que lo combatieron como candidato y como Presidente.
La organización secreta gobierna los estados de Guanajuato, Jalisco y Morelos. Tuvo el poder en Querétaro, que recientemente le arrebató el PRI. Así, de los gobiernos de Juan Manuel Oliva, Emilio González Márquez y Marco Antonio Adame salen los recursos para financiar al Yunque.
El 15 de febrero de 2002 tomó posesión como alcalde de la ciudad de Puebla; tiempo después, él y otros tres de sus compañeros fueron expulsados. Narra que hubo complot contra él, desde las más altas esferas de la Organización, que además se coludieron con Mario Marín Torres para deshacerse del ahora detractor.
El “góber precioso” o “Prex”, como lo conocen al interior del Yunque, es un caso particular. Según Luis Paredes, el gobernador de Puebla se mantiene en el puesto gracias a que el Yunque poblano lo sostuvo a capa y espada, luego del escándalo que le dio el apodo.
La sociedad sabe que los cárteles de la droga han penetrado las instituciones. Pero no saben que hay una organización que pretende sujetar al Estado, que delinque sin vergüenza y que actúa con total impunidad. El autor considera en la “historia  de una conspiración contra el Estado mexicano” que el Yunque, es el verdadero peligro para México.
  • Otros miembros:
  • Francisco Ramírez Acuña. Presidente de la Cámara de Diputados y ex secretario de gobernación.
  • José Luis Luege Tamargo. Director de la Comisión del Agua.
  • Juan Manuel  Oliva Ramírez. Gobernador de Guanajuato.
  • Emilio González Márquez. Gobernador de Jalisco.
  • Marco Adame Castillo. Gobernador de Morelos.
  • Jorge Ocejo Moreno. Senador por Puebla.
  • Ángel Alonso Díaz Caneja. Senador plurinominal por Puebla.
  • Antonio Sánchez Díaz de Rivera. Diputado Federal por Puebla.
  • Francisco Javier Salazar. Secretario del Trabajo en la administración foxista.
  • Alejandro Zapata Perogordo. Ex candidato a la gubernatura de San Luis Potosí.
  • Francisco Garrido Patrón. Ex gobernador de Querétaro.
  • Alfredo Botello Montes. Ex subsecretario de gobernación de Querétaro.
  • José Luis Durán Reveles. Presidente municipal de Naucalpan.
  • Miembros con pseudónimos dentro del Yunque:
  • Bernardo Ardavín Migoni (Cortés. Jefe general del Yunque y presidente de la Coparmex).
  • Guillermo Velasco Arzac (Jenofonte. Jefe nacional de El Yunque).
  • Agustín Aizpuru Gómez (Balmes. Jefe regional, zona centro).
  • Ana Teresa Aranda Orozco (Dona. Subsecretaria de Gobernación).
  • Mario Marín Torres (Prex. Gobernador de Puebla).
  • Melquíades Morales Flores (Astasio. Ex gobernador de Puebla).
  • Pablo Rodríguez Regordosa (Ché. Diputado federal plurinominal).

LA COFRADIA

Guanajuato

Guanajuato, bajo el gobierno de El Yunque…
                              (Suplemento de AM, León; 1 de junio del 2007) 
El gobernador Juan Manuel Oliva, su secretario de Gobierno, Gerardo Mosqueda, y el líder del Congreso local, Gerardo de los Cobos, son identificados como altos mandos del Yunque. La organización secreta del Yunque tomó el poder en Guanajuato. Hace casi 40 años, el Yunque empezó a reclutar a jóvenes guanajuatenses, y les impuso ideas fascistas. Hoy, los integrantes de aquellas primeras células han llegado al poder en posiciones clave en el Gobierno del Estado y en el Congreso local.
“En la primera célula del Yunque en Guanajuato estaban Gerardo Mosqueda Martínez (actual secretario de Gobierno) y Alberto Diosdado (titular de la Secretaría de Educación)”, revela Luciano Ruiz Chávez, fundador del Yunque en el estado en la década de los 70.“Yo vi a Mosqueda en reuniones del Yunque”, completa Luis Paredes Moctezuma, ex alcalde panista de Puebla y ex presidente del Frente Universitario Anticomunista (FUA).Paredes –quien durante 30 años fue yunquista activo- asegura que, además de Mosqueda, el actual gobernador Juan Manuel Oliva Ramírez, el senador Ricardo Torres Origel, el coordinador de los diputados locales del PAN, Gerardo de los Cobos Silva, y el secretario de Educación, Alberto Diosdado, forman parte del Yunque.
El seudónimo de Mosqueda, según Ruiz Chávez, era ‘Alcázar’, otorgado durante su juramentación en honor al general español José Moscardó. Luego, Mosqueda fue identificado con el sobrenombre de ‘Vekemans’, en honor a un sacerdote jesuita belga.Luciano Ruiz Chávez añade más nombres a la lista de yunquistas en el poder: Jorge Dávila Juárez, jefe del PAN en León y Elías Villegas Torres.“Mucha gente se fue a entrenar a un rancho de él (de Elías), se fue a entrenar en armas”, dice el fundador del Yunque en Guanajuato. “Se hizo un escándalo por eso, con varios padres de familia que se enteraron”.
Luis Paredes complementa la lista: el senador Ricardo Torres Origel y Gerardo de los Cobos.Según Paredes, Mosqueda se ha convertido en el jefe regional del Yunque, y el gobernador Juan Manuel Oliva cumple funciones más bien operativas. 
SUFREN EL PODER.-
Dos ex alcaldes de León, ambos del PAN, Eliseo Martínez Pérez y Ricardo Alaniz Posada, vivieron y sufrieron en carne propia, el poder del Yunque.“Elías (Villegas, supuesto líder del Yunque) me respondió que los militantes en el PAN sólo existen para hacer lo que la dirigencia ordena (…) Cuando les servimos nos apapachan y si no, nos echan”, dijo Eliseo Martínez Pérez.“Elías (Villegas) estaba enojado porque me eligieron en el Comité Ejecutivo Nacional del PAN como candidato al Senado y cuando se enteró me dijo… ahora pagas la campaña de Juan Manuel Oliva… así que yo pagué casi un millón”, añadió Ricardo Alaniz Posada, ex alcalde de León.
Un informe de la Dirección Federal de Seguridad, fechado el 17 de septiembre de 1982, y que obra en el Archivo General de la Nación, confirma la existencia del Yunque en Guanajuato e incluso detalla los sitios de reclutamiento y entrenamiento paramilitar.“Se comprobó que en el kilómetro 32 de la carretera León-San Felipe, existe una propiedad privada (…) en donde acuden jóvenes (…) para realizar ejercicios de tipo militar”, cita textual el informe. 

EL YUNQUE EN EL PODER

EJERCE PODER GRUPO SECRETO.                                     Manuel Mora MacBeath (Suplemento AM, León; 1 de junio del 2007) 
Según el investigador Álvaro Delgado, el Yunque ejerce el poder en Guanajuato, y da empleo en el Gobierno a los integrantes de la cofradía, sin importar su perfil o su capacidad. Dos destacados ex yunquistas coinciden en que se pervirtió el objetivo original de la organización secreta. Todo lo relativo al Yunque es de inobjetable interés público, sostiene el periodista de la revista Proceso y estudioso de la organización de ultraderecha, Álvaro Delgado Gómez. “El Yunque tiene medio siglo de vigencia y hasta la fecha sigue reclutando militantes jóvenes y adolescentes mediante la manipulación de su fe católica”.
 A diferencia de hace décadas, cuando la organización apenas cobraba fuerza, los yunquistas “ejercen importantes posiciones del poder en todos los niveles de Gobierno”.El riesgo de un Gobierno fáctico, como los es El Yunque en Guanajuato, implica varios riesgos para la sociedad. De entrada, comenta, afecta porque sus militantes son colocados en cargos públicos sin tener el perfil, sin estar calificados por aptitudes y competencias sino por pertenecer a la cofradía.
“Colocan adeptos ¡hasta en el servicio de recolección de basura!”, bromea, y da un ejemplo en concreto: “(Jaime Oliva) el hermano del Gobernador fue colocado en un cargo para el que su propio curriculum no acredita aptitud. “Eso es deslealtad a la ciudadanía y un acto de corrupción, es un desvío de recursos para satisfacer un compromiso partidista o de facción”.
 Y es que tras la toma de protesta de Juan Manuel Oliva Ramírez como Gobernador, su hermano Jaime fue designado coordinador de asesores de la Secretaría de Finanzas, a pesar de no contar con una carrera profesional terminada. Unos cuantos meses después renunció al cargo, en parte por la presión de los medios de comunicación. “Las incompetencias e ineptitudes (de los funcionarios públicos) tienen una consecuencia en la vida cotidiana porque no se resuelven los problemas desde el cargo público, porque son ineptos”, explica Álvaro. 
Garrote o zanahoria.
 Otro de los riesgos, dice Álvaro, está relacionado con las garantías individuales, consagradas en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.Delgado se refirió concretamente al discurso que pronunció hace unos 15 días el secretario de Gobierno, Gerardo Mosqueda Martínez –cuyo seudónimo en el Yunque es Vekemans-, en el que utilizó un lenguaje ofensivo para denostar el trabajo de los directores de dos medios de comunicación impresos.
Mosqueda aprovechó una reunión que sostuvo con delegados federales y funcionarios estatales casi exclusivamente para insultar a los directivos. “(Mosqueda) Actúa así porque se sabe inmune y porque cree llegado el momento de tomar revancha contra quienes considera enemigos… es peligroso, porque fue una reacción verbal que se materializará en acciones”, dice Álvaro.
 Los gobiernos panistas-yunquistas, acusa, tienen una visión patrimonialista del poder y de los recursos públicos, y por eso instrumentan boicots publicitarios. “Utilizan el presupuesto de publicidad como garrote contra quienes son sus enemigos, o como zanahoria para quienes les queman incienso… que donde quiera hay”.
Lo más grave, advierte, es la conducta facciosa que los caracteriza, y que los llevaría a la fabricación de delitos contra sus enemigos, a la fabricación de culpables de lo que sea: así sea pasarse un alto o no traer en regla sus papeles. Utilizan la persecución y otros métodos del fascismo, como intimidación, difamación, golpizas, con el fin de acallar por cualquier vía las opiniones de quienes le sean incómodos.
En general, el riesgo del Yunque para la sociedad es la implantación de una ideología autoritaria, excluyente y radical, que aunque “no podría afirmarse que está pasando en Guanajuato, hay signos de que ese es el propósito, de que están abriendo brecha para imponer un pensamiento único”. 
Pervierten origen de grupo.
 El ex alcalde panista de Puebla, Luis Paredes Moctezuma, y el fundador del Yunque en Guanajuato, Luciano Ruiz Chávez, están decepcionados del rumbo que tomó la organización: se pervirtió, coinciden. Sin embargo, ambos ex integrantes del Yunque se sienten orgullosos de haber pertenecido a este grupo ultraderechista –justificando su existencia por el avance de la ola comunista en el mundo-, y vuelven a coincidir en que si pudieran escoger, volverían a hacer exactamente lo que hicieron mientras fueron militantes.
El problema no es el Yunque, dicen, el problema es que la organización está fuera de contexto, se quedó en el pasado y perdió la brújula.
 Luciano Ruiz insiste en que se perdió la mística: de pretender implantar el reino de Dios en la tierra, combatir la pobreza y predicar con el ejemplo, el Yunque se convirtió en una agencia de colocación. Incumplen “con lo que juramos ante la Virgen; el primer compromiso que hicimos, la primera premisa, fue buscar la salvación de las almas, no sólo la personal, sin colectivas… no he sabido de ningún ejemplo de defensa de los pobres, a lo que también estábamos comprometidos.
“(En el Yunque) Manejan la pobreza como un medio, como lo hizo durante tantos años el PRI”, se queja Ruiz Chávez. Ya no hay homogeneidad en el Yunque, acusa, “hay cotos de poder… es una confederación de mafias”.
Ruiz lamenta que haya mucha gente con miedo a hablar, con miedo a abrirse ante la sociedad porque perderían su empleo. “Me duele lo que ha pasado (con el Yunque), ¡fascistas! ¡apóstatas! ¡mercenarios!; son unos farsantes, verdaderos fariseos… ¡falsificadores de Cristo!”, acusa.
 Luciano no se preocupa por haber roto el pacto de silencio en torno a la existencia de la Organización, primero porque el Arzobispo de Puebla lo ayudó a romper el juramento –lo cual, asegura, es la única vía para poder hablar-, y segundo porque, en todo caso, “yo traicioné a los hombres y ellos traicionaron a Dios, ¿qué es peor?”.
“¿En qué parte del camino dejamos todo tirado?”, dice que se cuestiona constantemente Ruiz Chávez, para quien los militantes del Yunque, hoy por hoy, son como unos “perros en el basurero peleándose por el hueso, que después -cínicamente- se voltean para decir a la sociedad ¿cómo nos vimos?”
A Luciano Ruiz le molesta –y duele- el olvido en que El Yunque tiene a Ramón Plata Moreno, ideólogo de la organización. Fue asesinado a tiros la Nochebuena de 1979, y el crimen quedó impune… “como muchos otros”. Sabe quienes son los homicidas de Plata Moreno –los mismos que orquestaron el crimen del periodista Manuel Buendía, según dice-, e incluso presentó la denuncia ante la Fiscalía Especial para Delitos del Pasado… pero nada ha pasado. 
¿Debacle yunquista?

Para Luis Paredes Moctezuma, el periodo crítico de la Organización Nacional del Yunque se dio entre 1988 y 2000. Fue ahí cuando se empezó a estropear, con la desintegración de organismos como Desarrollo Humano Integral y Acción Ciudadana (DHIAC), que iban cobrando influencia… aún así los desarticularon. “Tras el triunfo electoral de Vicente Fox en el 2000, el Yunque tiene la posibilidad de dar miles de chambas; debía evolucionar para gobernar con otra mentalidad”.
 Álvaro Delgado, Luciano Ruiz Chávez y Luis Paredes Moctezuma, coinciden en que es momento de que el Yunque “salga del clóset”. No que desaparezca, dice Luciano Ruiz, pero sí que se corrija el rumbo y salga de las penumbras. El problema, coinciden los tres, es que El Yunque era el poder detrás del poder… hoy está al frente. ESCALAN FUNCIONARIOS CON OBEDIENCIA Manuel Mora MacBeath/Enviado 
México, DF.- Sin duda, una de las personas que más información posee sobre la organización nacional del Yunque -sin pertenecer o haber pertenecido a ella-, es el periodista Álvaro Delgado Gómez. Entrevistado en las instalaciones del semanario Proceso, Delgado confiesa que lo que más le sorprende del Yunque es su nivel de penetración y número de militantes.
 La escalada de posiciones en el Gobierno , dice, se dio gracias a la obediencia. A la no objeción, a la no argumentación. “Como en un ejército, se emite la orden y se acata”.
La presencia del Yunque en el Gobierno, asegura, se delata con el patrón idéntico de conducta entre el partido (PAN) y el Poder Legislativo. Muestra de ello –detalla- fue la intentona en el 2000 para penalizar el aborto aún en el caso de violación.
 “Ricardo Torres Origel impulsó la iniciativa, pero Jorge Dávila Juárez (entonces asesor de la bancada panista) fue el artífice entre las penumbras”, asegura Delgado, quien en 2003 obtuvo el Premio Nacional de Periodismo por su investigación sobre el Yunque.  “Se entiende que se aferren a la oscuridad, pero su trayectoria, conducta y compañeros evidencian su pertenencia a la mafia”.
Según Delgado, el Yunque gobierna Guanajuato y utiliza la simulación como estrategia para pretender el anonimato. “Fernando Torres Graciano –jefe estatal del PAN-, Gerardo de los Cobos Silva –coordinador de la bancada panista en el Congreso local-, Juan Manuel Oliva Ramírez, y el ex gobernador Juan Carlos Romero Hicks, a veces dan la impresión de que están peleados, pero obedecen indiscutiblemente las instrucciones que se emiten desde las jefaturas”, dice.
 El periodista advierte que en Guanajuato la falta de oposición política por parte de los partidos ha generado impunidad en las acciones del Yunque, salvo escaramuzas aisladas.En el Congreso, dice, no hay contrapeso a las acciones del Yunque… menos en el Ejecutivo; el poder Judicial “no se puede ufanar de ser un contrapeso a las desmesuras de la organización, sin duda está infiltrado”.
El Yunque domina desde la estructura educativa, empezando con Fernando Rivera Barroso, luego con Víctor Manuel Ramírez Valenzuela y ahora con Alberto Diosdado, hasta el ejecutivo estatal. El Yunque es hegemónico.

EL YUNQUE EN GUANAJUATO

Exponen nexos Yunque-Gobierno Guanajuato

Según Luciano Ruiz Chávez, fundador del Yunque en Guanajuato, el jefe regional del grupo en la entidad es el Secretario de Gobierno
(El Reforma 02/06/2007)
El grupo secreto Yunque tiene los principales cargos del Gobierno de Guanajuato: el Mandatario Juan Manuel Oliva, su Secretario de Gobierno, Gerardo Mosqueda, y el titular de Educación, Alberto Diosdado, son miembros de esa agrupación.
También lo es el coordinador parlamentario del PAN en el Congreso local, Gerardo de los Cobos.
Según revela un suplemento del Diario A.M. de León, el grupo Yunque promovió hace varios años entrenamientos armados entre sus afiliados.
El suplemento, de ocho páginas, insertó en la edición local del diario que circula este sábado, y cuya cabeza principal es “Guanajuato: Bajo el gobierno del Yunque”, fue conocido entre los delegados a la Asamblea Nacional del PAN que elegirá nuevo Consejo directivo del partido.
En la polémica interna del panismo se señala a distintos dirigentes como presuntos integrantes de esa organzación secreta.
Según el testimonio de Luciano Ruiz Chávez, a quien se identifica como fundador del Yunque en Guanajuato en la década de los 70, el jefe regional del grupo secreto en la entidad es el Secretario de Gobierno, Gerardo Mosqueda.
“Mucha gente se fue a entrenar a un rancho de él (se refiere a Elías Villegas, líder local del panismo); se fue a entrenar en armas… Se hizo un escándalo por eso con varios padres de familia que se enteraron”, cuenta Ruiz de Chávez, según A.M.
Conforme testimonios recabados por A.M., Eliseo Martínez y Ricardo Alaniz, dos ex Alcaldes de León, de filiación panista, fueron “castigados” por el Yunque y obligados a obedecer sus planteamientos.
“Elías (Villegas) me respondió que los militantes en el PAN sólo existen para hacer lo que la dirigencia ordena… Cuando les servimos nos apapachan y si no, nos echan “, refiere Eliseo Martínez.
“Elías (Villegas) estaba enojado porque me eligieron en el Comité Ejecutivo Nacional del PAN como candidato al Senado y cuando se enteró me dijo: ‘ahora pagas la campaña de Juan Manuel Oliva’. Así que yo pagué casi un millón”, dijo Ricardo Alaniz, ex Alcalde de León.
Conforme la nota de A.M., en los archivos de la Dirección Federal de Seguridad, extinta policía política, existen datos sobre la existencia del Yunque.
“Un informe de la DFS fechado el 17 de septiembre de 1982, y que obra en el Archivo General de la Nación, confirma la existencia del Yunque en Guanajuato e incluso detalló los sitios de reclutamiento y entrenamiento paramilitar”, dice el periódico local.
Cita un párrafo del informe de esa época:
“Se comprobó que en el kilómetro 32 de la carretera León- San Felipe, existe una propiedad privada…en donde actúan jóvenes… para realizar ejercicios de tipo militar”.